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Gases inertes

Si comprende cómo se comportan los gases inertes, podrá evitar los riesgos derivados de la falta de oxígeno.

La deficiencia de oxígeno es un riesgo que existe cuando se manipulan gases como el nitrógeno, el helio, el dióxido de carbono, el neón y el argón. La clave aquí es seguir las mejores prácticas probadas.

Los gases que se producen de forma natural en la atmósfera no son tóxicos. Sin embargo, en concentraciones más elevadas sí tienen efectos sobre los organismos vivos y los procesos de combustión (especialmente en el caso del oxígeno).

El oxígeno en sí no es inflamable, pero favorece la combustión. En cambio, el nitrógeno y el argón inhiben la combustión.

Los cambios en la concentración de estos gases no son perceptibles para los órganos de los sentidos humanos. Si no se manipulan correctamente, pueden producirse accidentes.

Para que estos gases puedan almacenarse en forma líquida, deben enfriarse a temperaturas extremadamente bajas (menos de -180 °C a presión atmosférica). En este estado, pueden provocar rápidamente quemaduras por frío y hacer que ciertos materiales se vuelvan quebradizos, lo que a su vez puede provocar el fallo de piezas estructurales.

Zusammensetzung Inertgase
Oxígeno, vol.-% Medidas y síntomas
18 Límite inferior para trabajar sin máscara de aire fresco
< 18 Disminución significativa del rendimiento físico y mental sin notar nada anormal.
< 10 Riesgo de pérdida de consciencia sin signos de alarma al cabo de unos minutos
< 8 Pérdida del conocimiento a los pocos minutos; recuperación posible si se lleva a la persona inmediatamente al aire fresco
< 6 Pérdida de conocimiento casi inmediata

Peligros debidos a la falta de oxígeno

El oxígeno es esencial para la vida. Un adulto sano puede sobrevivir durante poco tiempo con un contenido de oxígeno de sólo un 16 % aproximadamente, pero en una atmósfera que respiran los seres humanos debe garantizarse un suministro suficiente de oxígeno. Cuando los niveles de oxígeno descienden, no hay síntomas claros inmediatos, de modo que una deficiencia no es reconocible para los órganos de los sentidos humanos.

Causas y prevención de la falta de oxígeno

La deficiencia de oxígeno puede evitarse observando las siguientes medidas:


  • Las fugas de gas (que no sean fugas de oxígeno) provocan automáticamente una deficiencia de oxígeno. Los aparatos y sistemas nuevos en los que se utilicen gases inertes u otros gases deben revisarse cuidadosamente para detectar posibles fugas. Para ello, debe realizarse una prueba de caída de presión del gas y, además, una prueba de estanqueidad con un líquido detector de fugas homologado compatible con el aparato o la instalación en cuestión.
  • Todos los equipos e instalaciones, incluidas las tuberías y conexiones de mangueras, deben estar correctamente montados. Hay que asegurarse de que las mangueras y otros componentes sean estancos y estén protegidos contra daños. Todos los trabajos de mantenimiento y reparación deben ser realizados por personal experimentado y plenamente cualificado.
  • Una vez finalizada la fase de trabajo, debe cerrarse la válvula de la bombona de gas o la válvula de cierre del suministro de gas a través de la tubería para evitar que se escape gas entre dos fases de trabajo. Las válvulas de los equipos de soldadura no son válvulas de cierre fiables para el suministro de gas. Las bombonas de gas en uso no deben manipularse bruscamente ni volcarse.
  • Una pequeña cantidad de gas licuado puede vaporizarse en un volumen de gas muchas veces mayor. Por lo tanto, el GLP derramado en espacios confinados puede provocar rápidamente una deficiencia de oxígeno. Por lo tanto, los depósitos y equipos de almacenamiento y manipulación de gas licuado deben revisarse y mantenerse cuidadosamente de acuerdo con la normativa y las recomendaciones pertinentes.
  • Los gases de ventilación suelen tener un bajo contenido de oxígeno. Una atmósfera con estos gases es inadecuada como zona de trabajo.
  • La deficiencia de oxígeno se produce cuando los componentes de la planta, como los tanques, se purgan con nitrógeno u otros gases inertes como preparación para las reparaciones.
  • Los procesos que vaporizan nitrógeno líquido, como la refrigeración de alimentos, la congelación de terrenos, la criocirugía y la conservación del plasma sanguíneo, crean automáticamente atmósferas en las que falta el oxígeno. Las personas no deben acceder a estas zonas sin un equipo respiratorio adecuado. Esto se aplica incluso si la atmósfera es sólo ligeramente deficiente en oxígeno. Las zonas de este tipo deben estar equipadas con detectores y sistemas de alarma adecuados.
  • Todos los procesos que utilizan gas para soldar y calentar extraen oxígeno del aire. Estos procesos pueden provocar una deficiencia de oxígeno si la zona de trabajo es demasiado pequeña o está mal ventilada.
  • Extraer argón, dióxido de carbono o cualquier otro gas frío de grandes recipientes y pozos profundos puede resultar difícil porque estos gases son más densos que el aire. Cuando se introduce aire en el fondo de estos espacios, normalmente asciende a través del gas denso sin desplazarlo. Esto significa que el proceso de purga puede durar mucho más de lo previsto.

Detección de enriquecimiento o deficiencia de oxígeno

Las zonas en las que el contenido de oxígeno puede variar hasta un grado peligroso deben vigilarse continuamente con dispositivos de medición que indiquen los aumentos y disminuciones de la concentración de oxígeno en la atmósfera circundante.

En espacios confinados, estos medidores deben colocarse lo más cerca posible de los trabajadores. Lo ideal sería que los trabajadores estuvieran equipados con un dispositivo de medición portátil sujeto a su ropa.

Los métodos de medición no continuos sólo pueden utilizarse si puede detectarse a tiempo la tendencia a cambios peligrosos en el contenido de oxígeno entre dos mediciones.

Otros gases:


  • El contenido de oxígeno no es el único factor que determina si una habitación es segura o no. Otros gases, por ejemplo los gases combustibles y los óxidos de nitrógeno utilizados junto con los quemadores de corte o de gas, también pueden afectar a la atmósfera. En caso necesario, dichas atmósferas deberán ser controladas.
  • Medidas de prevención
  • Los equipos utilizados en la producción, distribución y uso de gases inertes deben instalarse y etiquetarse de acuerdo con las recomendaciones de la industria de gases industriales y cumplir toda la normativa pertinente.
  • Todas las fugas deben ser tratadas por personas debidamente formadas y con el equipo adecuado.
  • Los trabajadores y socorristas deben saber qué hacer en caso de incidente.
  • El personal operativo y de explotación debe cumplir en todo momento las normas y reglamentos vigentes en la obra y llevar equipo de protección cuando sea necesario.
  • Todas las personas que trabajen en locales en los que existan riesgos debidos a la falta o al enriquecimiento de oxígeno deberán ser informadas de manera adecuada sobre los riesgos respectivos. Hay que subrayar que estos riesgos no son fácilmente aparentes y pueden convertirse muy rápidamente en un peligro real para los trabajadores sin señales de advertencia.

Linde ofrece formación sobre los riesgos asociados a las aplicaciones de la tecnología del gas y sobre las medidas para evitar o minimizar estos riesgos.